23 ene 2012

No regrets.

Contaminándose, envenenándose a mordiscos, dos almas se entrelazan y se confunden con el vapor. Entre deseos y temores enfrentados, la victoria se la llevó el estúpido corazón. Y entre dudas caminaron vacilantes, retando a la razón, apuñalándola. Una masacre.

Como buen riesgo que era, no se olvidó de traer consigo las consecuencias. Pasaron de acariciar sus sentimientos a estrangularlos. A soñar con respuestas, a odiar las preguntas. A caminar a tientas entre puntos suspensivos, en busca de un punto y final que parecía no llegar nunca. Es lo que ocurre cuando te balanceas sobre la fina línea entre la lógica y la pasión, entre lo conveniente y lo excitante; sabiendo que en algún momento perderás el equilibrio. Quien juega con fuego, es porque desea quemarse. Desea sentir algo, aunque sea dolor.

¿Pero quién era Precaución para detenerles? ¿Quién coño era ella para establecer los límites? Precaución fue ignorada como tantas otras veces, y hoy ambos tratan de averiguar cómo curar la herida sin que quede cicatriz. Ellos saben que el pasado nunca será presente, y que el futuro no llevará escrito su nombre. Pero, admirablemente, o estúpidamente, ninguno de los dos se arrepintió jamás. 

13 ene 2012

Ser o no ser, esa es la perdición.

Soy el mar. Soy la tentación. Soy el llanto de un recién nacido. Soy el silencio que asesinas con cada grito. Soy el escondite de la luna las noches que no la encuentras en el cielo. Soy misterio. Soy una lágrima gris en el cementerio. El tiempo perdido, el norte perdido, los besos que no se dan. La oportunidad perdida, la esperanza perdida, los amigos que se van. Soy el pajar que encierra la aguja. Soy caos. Soy el suspiro que se te escapa al dejar entrar los recuerdos y volar la imaginación. Soy lujuria. Un cigarrillo mal apagado, un secreto nunca guardado. Soy miedo. El anillo que se pone un enamorado, el que se quita al probar el adulterio. Soy una conciencia ardiente. Soy mentira. Soy una cama desecha. Soy pasión. Una puñalada por la espalda, una grieta en el corazón. Soy una pregunta sin respuesta, soy un cuento sin final. Soy quien tiene los bolsillos vacíos y el corazón lleno. Soy original. La media naranja que se convirtió en mandarina, el príncipe que se convirtió en rana. Soy un pero. Un sueño que se queda en intento, y un intento fallido que quería ser sueño. Soy dueño de nada y de mí mismo. Soy un preso inocente. Soy la inocencia perdida. La droga que te consume, un devorador de vida. Soy tu adicción, tu vicio y tu destrucción. Soy un adiós. La aguja de un reloj que desobedece tus órdenes, la distancia que separa personas y no lugares. El viento que te abofetea, la realidad que mata. Soy la perfección del defecto que en efecto tengo. El amor y su efecto. Soy músico, escritor, estudiante y maestro. Nada modesto. Un don nadie que no quiso vivir en el montón. Soy un punto y final. Soy tantas cosas que ya no sé ni lo que soy, que solo sé lo que quiero ser, y lo que no soy que quizá un día seré. Soy yo; y soy exactamente igual que tú.